Una experiencia íntima y profundamente enriquecedora. 

Disfrutamos de sesiones de yoga que se adaptaron a todos los niveles, centradas en mejorar la flexibilidad y la fuerza, y en la conexión mente-cuerpo. El Fisioyoga, una innovadora fusión de fisioterapia y yoga, fue un punto destacado, ofreciendo enfoques personalizados para el bienestar físico.

Pudimos aprender técnicas prácticas para integrar la atención plena en la rutina diaria, ayudando a manejar el estrés y mejorar la calidad de vida. Las sesiones de control de la respiración proporcionaron herramientas valiosas para la autogestión emocional y el mejoramiento del rendimiento físico y mental.

Además, el retiro incluyó excursiones de senderismo por la Sierra, permitiéndoos sumergirnos en la belleza natural y tranquilidad del entorno, reforzando la conexión con la naturaleza y con nosotros mismos. Este retiro en Navacerrada fue una oportunidad perfecta para desconectar, recargar energías y llevarse habilidades y conocimientos aplicables en la vida cotidiana, todo ello en un ambiente íntimo y de apoyo.